viernes, 11 de mayo de 2018

Coeducación en las aulas

Los institutos almerienses Aurantia, de Benahadux, y Mar Serena, de Pulpí, han sido galardonados con el segundo premio en la elaboración de materiales educativos en la XI Edición de estos Premios y que forman parte de los recursos del Portal de Buenas Prácticas del Profesorado de la Consejería de Educación.

En el ámbito educativo tenemos un pilar importante para la defensa de los Derechos en igualdad de oportunidades de los menores y de las políticas de igualdad como instrumento para avanzar hacia una sociedad democráticamente más justa y equilibrada en la toma de decisiones entre hombres y mujeres.

El conjunto de actuaciones y medidas que en materia de igualdad, coeducación y prevención de la violencia de género tiene en marcha el Gobierno andaluz en los centros del sistema público educativo de nuestra Comunidad, no tendría proyección si en las aulas las buenas prácticas docentes no ejercieran el impulso en la formación del alumnado.

El primer paso para el verdadero desafío que tenemos por delante en la coeducación, es involucrar al alumnado en la igualdad de género para que sea efectivamente una realidad en todos los ámbitos de la vida. La escuela es un lugar idóneo, y no eliminando las diferencias mediante la presentación o imposición de un único modelo u homogeneizando las mentes de niñas y niños sino, todo lo contrario, enseñando a respetar lo diferente y a disfrutar de la riqueza que ofrece la variedad.

El profesorado en Andalucía está absolutamente implicado en las actuaciones y medidas específicas en las que se trabaja en el lenguaje y materiales no sexistas y en los nuevos currículos educativos También son muchas las medidas para la sensibilización y prevención de la violencia de género. El 81% de la dirección de los centros educativos de nuestra región percibe que los logros son altos o muy altos respecto a las actuaciones que se realizan en las aulas.

En nuestra Comunidad Autónoma contamos con un marco normativo estable que favorece medidas para la convivencia, la cultura de paz, la educación en valores, los valores democráticos y solidarios, y la igualdad entre hombres y mujeres.

Desde la escuela empezamos por los cimientos para que las medidas y políticas para un verdadero cambio social que suponga una profunda transformación estructural en la que las mujeres sean protagonistas y copartícipes.


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