Estamos en el peor de los escenarios posibles. Ni siquiera los peores presagios nos hacían vaticinar que el PP iba a volver a mostrar su actitud avara, miserable y cicatera con Almería como lo ha hecho plasmando por escrito la pírrica cifra que prevén gastar en la provincia y que figuran en el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2018. Tan sólo en atrasos, en obras presupuestadas pero no ejecutadas, Mariano Rajoy nos adeuda – como reclamamos desde el PSOE- unos 500 millones, más otros 500 por un injusto sistema de financiación.
Rajoy y sus compañeros en la provincia: Amat, Hernando, Matarí… dicen mucho en muy poco. Los Presupuestos son un nuevo y auténtico atropello a Andalucía que viene a consolidar el hecho de que siempre que la derecha reparte recursos, nuestra comunidad y nuestra provincia salen perjudicadas y maltratadas. El Gobierno del PP pone y quita millones a su antojo en esta provincia. Adelgaza partidas, las mueve, las camufla o, directamente, las hace desaparecer. Más que gestores de lo público, los dirigentes del PP parecen un grupo de trileros que convierten en la nada, en el vacío, los millones que, antes de iniciar la partida, nos muestran y nos hacen pensar que están debajo del vaso con la pelotita.
Los Presupuestos del PP siguen sin dar respuesta a las grandes demandas de esta provincia. No traen nada bueno sobre alta velocidad, agua, energía, carreteras, nada. Nos traen solo malas noticias. Y también es importante que la ciudadanía sepa lo que, según Rajoy, le corresponde. Según el PP a los almerienses nos corresponde menos que a cualquier ciudadano o ciudadana de este país. En el reparto de inversión por habitante salimos muy mal parados. Ochenta euros por persona en Almería mientras que la media nacional se sitúa en 217 euros, un 36% más que la paupérrima cifra prevista para nuestra provincia. Ese gasto sitúa a Almería en la última por la cola del país en inversión. Así de claro y constatable.
Lo que al Gobierno de España le sale barato a los almerienses nos sale muy caro. Significa que seguiremos sin avanzar. Seguiremos sin obras, sin emprendimiento y sin creación de empleo porque nada se mueve. Pero sí es necesario que algo se mueva. Es necesario que se mueva la población y que sea ella quien castigue, con sus votos, la pésima gestión del PP y el maltrato constante a nuestra provincia.
Rajoy y sus compañeros en la provincia: Amat, Hernando, Matarí… dicen mucho en muy poco. Los Presupuestos son un nuevo y auténtico atropello a Andalucía que viene a consolidar el hecho de que siempre que la derecha reparte recursos, nuestra comunidad y nuestra provincia salen perjudicadas y maltratadas. El Gobierno del PP pone y quita millones a su antojo en esta provincia. Adelgaza partidas, las mueve, las camufla o, directamente, las hace desaparecer. Más que gestores de lo público, los dirigentes del PP parecen un grupo de trileros que convierten en la nada, en el vacío, los millones que, antes de iniciar la partida, nos muestran y nos hacen pensar que están debajo del vaso con la pelotita.
Los Presupuestos del PP siguen sin dar respuesta a las grandes demandas de esta provincia. No traen nada bueno sobre alta velocidad, agua, energía, carreteras, nada. Nos traen solo malas noticias. Y también es importante que la ciudadanía sepa lo que, según Rajoy, le corresponde. Según el PP a los almerienses nos corresponde menos que a cualquier ciudadano o ciudadana de este país. En el reparto de inversión por habitante salimos muy mal parados. Ochenta euros por persona en Almería mientras que la media nacional se sitúa en 217 euros, un 36% más que la paupérrima cifra prevista para nuestra provincia. Ese gasto sitúa a Almería en la última por la cola del país en inversión. Así de claro y constatable.
Lo que al Gobierno de España le sale barato a los almerienses nos sale muy caro. Significa que seguiremos sin avanzar. Seguiremos sin obras, sin emprendimiento y sin creación de empleo porque nada se mueve. Pero sí es necesario que algo se mueva. Es necesario que se mueva la población y que sea ella quien castigue, con sus votos, la pésima gestión del PP y el maltrato constante a nuestra provincia.
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